domingo, 13 de octubre de 2024

La libertad es el tema

(Texto leído el 12 de octubre de 2024 en el Centro Cultural El Cauz, de Xalapa, durante la ceremonia de presentación del libro La libertad es el tema, de Alain Derbez, publicado por la Editorial Mar Adentro). 

 De entre las definiciones de anarquismo que conozco, la que me resulta más clara es aquella que la refiere como “una ideología política que pretende conseguir la emancipación del hombre de todo tipo de organización jerárquica que limite coactivamente su libertad”. Creo que esta enunciación se aviene adecuadamente con el libro que hoy presentamos, con su narrativa y con su estructura, porque ni la una ni la otra resultan convencionales, como debe suceder, entiendo, con todo texto que aspira a rendir cuenta de la pasión libertaria. Lo anterior no significa, desde luego, que los escritos de pensadores anarquistas militantes como Anselmo Lorenzo o Federica Montseny posean una estructura especialmente compleja. Todo lo contrario: suelen ser textos sencillos, directos, conscientes de su afán proselitista y del perfil de sus destinatarios. Significa, creo, que la aspiración de encarnar estéticamente el pensamiento libertario incluye la certeza de que cualquier concesión al facilismo literario, cualquier debilidad ante las exigencias del mercado, es una forma de claudicación ante el anhelo de plasmar literariamente la rebeldía y el afán reivindicatorio de una forma de pensamiento que, paradójicamente, busca contar con la participación de las masas de una manera sencilla y espontánea. Esta paradoja define, me parece, la vertiente central de La libertad es el tema: sucede que estamos ante una obra que rinde homenaje al pensamiento anarquista, a su honestidad, su valentía y su congruencia, al tiempo que reivindica su derecho a presentarse como un reto para los lectores, como una provocación que demanda su total atención mediante una construcción compleja, que alterna los espacios temporales y espaciales y delimita de manera heterodoxa sus afanes interpretativos. Si alguno, el sentimiento que domina a este libro, es el de la admiración: admiración hacia un grupo de pensadores y activistas que aspiraron a construir una sociedad de iguales, sin convertirse en dirigentes de nadie, sin abandonar nunca sus oficios y actividades ordinarias y quienes, además, vivieron una vida congruente con sus principios éticos. Es verdad que un sector de los militantes anarquistas no descartó el recurso de las acciones violentas; también lo es que enfrentaron con dignidad las consecuencias de sus afanes. De esto y más trata el libro que hoy presentamos: ante los ojos del lector van apareciendo, no necesariamente en orden cronológico o geográfico, las mujeres y los hombres que se empeñaron (empeño que no ha cesado hasta nuestros días, debe anotarse) en construir un mundo en el que tanto los adultos, como los jóvenes y los niños, convivan en igualdad de condiciones y sin que un aparato legal y coercitivo regule su cotidianidad y sus aspiraciones. Así, lo mismo Bakunin que Emma Goldman o Anselmo Lorenzo, los grandes personajes del anarquismo (grandes a pesar suyo) van apareciendo en La Libertad es el tema en un concierto que no resulta convencional porque quien emite el discurso no pretende serlo: se trata, podría afirmarse de un orden desordenado, que ya desde su estructura invita a la reflexión no canónica, en la que los principios de disposición y adecuación comedidas son dinamitadas, para ser reemplazadas por una percepción múltiple que entrega al lector una visión variada y compleja. Alain Derbez es autor de una obra múltiple y diversa que incluye lo mismo poesía que narrativa y ensayo. Su trayectoria comprende, además, tareas como difusor en medios masivos de comunicación como la televisión, la radio y la prensa escrita; así como al frente de proyectos tales como colecciones editoriales o revistas. Lo característico de su producción es, todo caso, un afán por impulsar la diversidad de pensamientos y sensibilidades, convencido de que únicamente la expresión de dicha multiplicidad permitirá a las personas y las generaciones experimentar la libertad a la que todos tenemos derecho, convencido, en suma, de que La libertad es el tema. De esto trata el nuevo título de la Editorial Mar Adentro, un proyecto editorial gestado en el Puerto de Veracruz, que aspira, desde luego, a encontrar lectores en todas las ciudades. Ojalá el encuentro se produzca. Muchas gracias.

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